Cuando estás aquí conmigo esta habitación no tiene paredes,
sino árboles, infinitos árboles.
Cuando estás aquí a mi lado el techo púrpura ya no existe,
y veo el cielo sobre nosotros.
y veo el cielo sobre nosotros.
Estamos aquí, abandonados como si no hubiera nadie más,
nadie más en el mundo.
nadie más en el mundo.
Se escucha una armónica que retumba como un órgano,
vibra para ti y para mí en la inmensidad del cielo,
para ti y para mí en el cielo.
vibra para ti y para mí en la inmensidad del cielo,
para ti y para mí en el cielo.
Franco Battiato